Vuelve Colombia a vivir la época de los panfletos terroristas
amenazantes y los titulares de prensa mandados por el gobierno. Ambos, igual de
dañinos para la democracia de nuestro país.
Los panfletos mandados los últimos meses por terroristas de las farc,
según ellos a “enemigos de la paz” no dejan de ser una actividad intimidadora
utilizada por los bandidos para callar a quienes estamos en contra de una
negociación mentirosa en Cuba. Son también actividades que nos demuestra que
los verdaderos enemigos de la paz son los que no permiten la libre expresión,
los que niegan secuestros y torturas de secuestrados, los que no aceptan su
participación en el narcotráfico pero plantean legalización de cultivos
ilícitos. Esos son los verdaderos
enemigos de la paz, nosotros, los que utilizamos como única arma nuestra
palabra con municiones de verdad y que creemos en la democracia, no callaremos las
denuncias ante los crímenes atroces de los terroristas, la permanente violación
de derechos humanos y el trato preferencial que le está dando el gobierno en Cuba.
Adicionalmente, están los titulares de prensa mandados por el Gobierno
de Santos que no dejan de ser más que propaganda política mentirosa para una
campaña reeleccionista. Titulares amañados, farsantes y con el único ánimo de
desinformar a la gente. No es un secreto que los medios de comunicación están
recibiendo una cantidad enorme de pauta por parte del gobierno para vender una
imagen y unos supuestos logros. Pero la población civil ya se dio cuenta de esa
técnica y no cree en el gobierno nacional y mucho menos en los medios de
comunicación.
Así pues, no sólo estamos en un país que la desconfianza y pesimismo
está en niveles de la década de los noventa. Sino que también volvemos a luchar
contra una creciente amenaza por parte de los terroristas que no quieren que
protestemos en contra de sus crímenes y una prensa vendida a un gobierno
mentiroso y traidor.