¡Revocatoria Ya!

Un momento histórico está viviendo Bogotá en estos días. No es precisamente por los avances que se estén logrando en materia gobernabilidad, movilidad, limpieza o progreso. Al contrario, el tema va direccionado más en la reacción ciudadana ante el mal gobierno del alcalde Gustavo Petro. Y es que desde un principio existía una gran desconfianza como un ex guerrillero iba a manejar la capital de Colombia, algunos decidieron darle tiempo de espera para que trabajara. Hoy la ciudad ve resultados pésimos, manejada con improvisación y sin un norte claro. Pero la ciudadanía despertó y los bogotanos están aclamando un cambio inmediato.

Ya la recolección de firmas llegó a su meta de 290 mil, sin embargo los promotores de tan importante iniciativa trabajan por llegar a un mínimo de 400 mil para ser presentadas a la Registraduría Nacional.  El liderazgo de Miguel Gómez Martínez como el empuje y dedicación de grupo de jóvenes como Creo Colombia llenan de esperanza a Bogotá, ciudadanos que buscan un gobierno responsable y comprometido con el verdadero desarrollo de la ciudad.

Los que no han firmado, los invito a que lo hagan lo más pronto posible. La verdadera democracia es la que muestra la voluntad del pueblo bajo las leyes, esta oportunidad es única y toda la capital debe decir ¡Revocatoria Ya!

Unidos a recuperar el rumbo

Con el transcurso de los días se ve cómo el Uribismo se consolida aún más como la fuerza política más importante del país. Sin lugar a dudas, la cabeza es el ex presidente Álvaro Uribe, pero contar con un grupo cercano leal y trabajador que defienden y promueven las tesis políticas del Centro Democrático llena de esperanza a un país que perdió el rumbo en el 2010. Óscar Iván Zuluaga, Francisco Santos, Juan Carlos Vélez, Carlos Holmes Trujillo, Marta Lucia Ramírez, José Félix Lafaurie, Luis Alfredo Ramos, Liliana Rendón, otros líderes regionales y millones de colombianos hoy están más unidos que nunca con la meta clara de volver a poner el país en un camino de paz y prosperidad.

La muestra democrática del Uribismo es alentadora. Todos los líderes están recorriendo el país para dialogar con los ciudadanos, preguntarles sobre las dificultades que presentan y formando así un plan de gobierno que será liderado por el ganador entre todos los precandidatos y la lista del senado del año 2014. El respeto entre los líderes uribistas es una muestra que la democracia está madurando y nos representa una tranquilidad de que los verdaderos intereses nacionales están por encima de los intereses personales. Sea quien sea el candidato a la presidencia tendrá la fortuna de contar con un grupo comprometido con políticas exitosas como las del Centro Democrático y no por una burocracia como lo muestra hoy la llamada Unidad Nacional.

Se vienen momentos donde los colombianos debemos promover y defender las políticas con las que nos sentimos identificados y que han sido probadas con éxito. La Seguridad Democrática, la cohesión social, la confianza inversionista, el estado austero y la participación ciudadana, nos llevarán a recuperar el rumbo perdido.

 ¡El Uribismo está más vivo que nunca! 

Encuesta pesimista

La nueva encuesta de Gallup muestra que absolutamente todos los datos del actual gobierno continúan la tendencia hacia la baja. La realidad del país es evidente. La desconfianza de la ciudadanía continúa y el futuro con el actual gobierno es cada vez más desconsolador.  Ya queda claro entonces que no era una simple percepción como lo decía el presidente Juan Manuel Santos, sino que es una triste realidad que no se ha afrontado de manera correcta.

Santos continúa con una imagen supremamente baja, con sólo el 44% de imagen favorable. El tema más inquietante es sin duda el mal manejo que le da a la seguridad y guerrillas, pues tan sólo un 20% lo aprueba y un 67% lo desaprueba. Pero la encuesta manifiesta más preocupaciones, la corrupción, el desempleo, la economía, costo de vida, narcotráfico, entre otros. La crisis es tremenda y el problema no es cuestión de sintonía o de fallas al transmitir los supuestos logros, el problema es de desconfianza de un gobierno que le ha mentido al país.

Recordemos que en España, el hoy ex presidente Zapatero duró varios años para aceptar una crisis económica y salía en los medios diciendo que todo “iba bien” y que era problema de la derecha española. Los resultados del país ibérico hoy los conocemos, su enorme crisis y la desconfianza continúa. Santos y Zapatero se parecen mucho, esperemos que el panorama de Colombia en el futuro no sea el mismo que tiene hoy España, por culpa de un presidente que niega la realidad sólo por tratar de salvar su pellejo.

Paro cafetero, Justo y necesario

Hoy 25 de febrero de 2013 se inicia el paro cafetero nacional. Una decisión valerosa y fuerte por parte de uno de los gremios más importantes del país, pero sin lugar a dudas el  sector más querido de los colombianos. Colombia ha sido reconocida internacionalmente por su buen café, su exquisito aroma y por su magnífica propaganda. Pero la crisis se siente en todas las familias cafeteras que ante los oídos sordos del gobierno nacional decidieron pararse y protestar justificadamente los abusos y la inaceptable indiferencia por parte de los funcionarios públicos y la federación quienes no atienden sus peticiones y reclamos.

Se hablan de más de 3 millones de colombianos que se benefician directa e indirectamente del negocio del café. Hoy esas familias sienten un desconsuelo e incertidumbre para el futuro de su trabajo. El gobierno Santos ha dedicado todo su tiempo en negociar con terroristas de las FARC en Cuba una reforma agraria y ha dejado a un lado los colombianos de bien que trabajan legalmente todos los días para el buen desarrollo de sus familias y el país. Es un reclamo justo y necesario que los colombianos de bien debemos apoyar, pues el producto insignia está en declive y el futuro de millones de personas en una fuerte crisis.

 Hay que apoyar el paro cafetero y exigir al gobierno una inmediata atención. 

¿Locomotoras, cuales locomotoras?

Las famosas locomotoras del gobierno de Juan Manuel Santos no dejan de ser más que una publicidad política. El país no ha tenido ningún avance importante en los últimos 3 años, pues el presidente y sus ministros se han dedicado a hacer promesas. Aunque hay que reconocer, que han recorrido el país para inaugurar muchos proyectos, estos venían del gobierno anterior.

La agricultura está en tremenda crisis, el desempleo rural supremamente alto y una crisis cafetera que ha durado más de dos años. Ineficiencia por parte del Ministro Juan Camilo Restrepo.

La minería está andando a pasos acelerados, pero la ilegal. No hay controles gubernamentales y los grupos armados ilegales se están apoderando de ese campo. Daño ambiental y social.

La locomotora de la innovación tampoco tiene algún logro en el tiempo del actual gobierno. No se está apoyando iniciativas nuevas y no se realizó la muy aclamada reforma de educación. Otra vez los estudiantes quieren salir del país porque no ven oportunidades en Colombia.

La infraestructura ni que hablar, una de las obras más importantes del país, las autopistas de la montaña, ya no serán autopistas sino carreteras y no se sabe cuando comienza. Freno en seco a tan importante proyecto.

Finalmente, la locomotora de la vivienda es la que más publicidad ha tenido. Cabe resaltar que se han entregado algunas casas en diferentes lugares del país, pero con engaño a la ciudadanía. El caso de Pradera lo confirma, casas que construyó Confandi desde hace 3 años y las compró el gobierno. No han construido una sola vivienda.

Este ha sido un gobierno de promesas, titulares, y mucho carnaval. 

La injusticia continúa

Si hay algo que nos molesta a muchos colombianos es la continua injusticia que se vive en nuestro país. Resulta mucho más fácil mandar a la cárcel a una persona que le robaron que al propio ladrón. El Estado colombiano vive interminablemente pagando dineros por fallos judiciales en su contra, pero también miles de ciudadanos son culpabilizados muchas veces por crímenes que no cometieron.

Bien recordado es el caso de Agro Ingreso Seguro, en el cual el ex ministro Andrés Felipe Arias se encuentra privado de su libertad por ser el gestor de un excelente programa que benefició a cientos de agricultores en todo el país, mientras que los que engañaron a El Estado para adquirir subsidios de forma ilegal hoy se encuentran libres aunque hayan sido declarados culpables. Las pruebas que tiene la Fiscalía General de la Nación se siguen cayendo día a día en el juicio que se le adelanta a Arias, pero lo mantienen alejado de su familia y lo muestran como un delincuente. La justicia manejada por un grupo que busca simplemente una venganza criminal contra un gobierno exitoso que combatió todos los criminales.

Pero, esta semana se ha hablado mucho nuevamente sobre el tema del Holocausto del Palacio de Justicia. Terrorismo consumado únicamente por los guerrilleros del M-19 con ayuda de Pablo Escobar, que dejó más de 100 colombianos asesinados. Los actores de tan terrible episodio de nuestra nación están hoy haciendo política libremente en muchas ciudades del país, mientras que uno de los héroes que participaron en el rescate - en una de las operaciones militares más difíciles que ha tenido nuestro ejército nacional- el Coronel Luis Alfonso Plazas Vega, se encuentra privado de su libertad por casi 6 años. El caso de Plazas Vega es igual de aterrador e injusto que el del ex ministro Andrés Felipe Arias. El coronel lo culpan de la supuesta desaparición de 2 ciudadanos, uno de ellos que se dice murió en el incendio del Palacio de Justicia y la otra una guerrillera, llamada Irma Franco, que no se sabe su paradero pero que no existe una sola prueba que culpabilice a Plazas Vega de su desaparición. Además de un juicio que se llevó con muchas irregularidades principalmente con el testigo estrella que fue suplantado.

Ante la demanda en la Corte Interamericana de Derechos Humanos se está acusando al Estado Colombiano de la desaparición de ciudadanos, sin embargo la defensa colombiana ha dicho claramente que no existen desaparecidos en dicho evento. Entonces es cuando uno puede claramente decir que un Estado debe mantener una separación de poderes para fortalecer la democracia, pero es inaceptable que un Estado de Derecho sea incoherente..

Los colombianos reclamamos libertad inmediata para Andrés Felipe Arias y el Coronel Plazas Vega. 

Panfletos y titulares de prensa

Vuelve Colombia a vivir la época de los panfletos terroristas amenazantes y los titulares de prensa mandados por el gobierno. Ambos, igual de dañinos para la democracia de nuestro país.

Los panfletos mandados los últimos meses por terroristas de las farc, según ellos a “enemigos de la paz” no dejan de ser una actividad intimidadora utilizada por los bandidos para callar a quienes estamos en contra de una negociación mentirosa en Cuba. Son también actividades que nos demuestra que los verdaderos enemigos de la paz son los que no permiten la libre expresión, los que niegan secuestros y torturas de secuestrados, los que no aceptan su participación en el narcotráfico pero plantean legalización de cultivos ilícitos.  Esos son los verdaderos enemigos de la paz, nosotros, los que utilizamos como única arma nuestra palabra con municiones de verdad y que creemos en la democracia, no callaremos las denuncias ante los crímenes atroces de los terroristas, la permanente violación de derechos humanos y el trato preferencial  que le está dando el gobierno en Cuba.

Adicionalmente, están los titulares de prensa mandados por el Gobierno de Santos que no dejan de ser más que propaganda política mentirosa para una campaña reeleccionista. Titulares amañados, farsantes y con el único ánimo de desinformar a la gente. No es un secreto que los medios de comunicación están recibiendo una cantidad enorme de pauta por parte del gobierno para vender una imagen y unos supuestos logros. Pero la población civil ya se dio cuenta de esa técnica y no cree en el gobierno nacional y mucho menos en los medios de comunicación.

Así pues, no sólo estamos en un país que la desconfianza y pesimismo está en niveles de la década de los noventa. Sino que también volvemos a luchar contra una creciente amenaza por parte de los terroristas que no quieren que protestemos en contra de sus crímenes y una prensa vendida a un gobierno mentiroso y traidor.